Desde Humilladero, con hilo y dedal: Juani, la costurera que teje comunidad y alegría

En el corazón de la provincia de Málaga, donde el sol abraza la tierra de la campiña, Humilladero guarda un tesoro viviente. No está en una vitrina, sino entre patrones, telas y el rítmico zumbido de una máquina de coser. Es Juani, la costurera, un pilar de afecto, creatividad y soluciones en su pueblo.

Su taller, más que un local, es un refugio acogedor. Al traspasar la puerta, no solo se encuentran madejas de colores y metros de tela, sino una sonrisa sincera y una taza de café siempre dispuesta. Juani ejerce un oficio que muchos consideran en desaparición, pero ella lo ha reinventado como un servicio esencial y un arte comunitario.

¿Un pantalón que necesita un arreglo urgente para una entrevista? Juani lo deja como nuevo. ¿El vestido de primera comunión de la nieta que necesita un ajuste? En sus manos expertas, queda perfecto. ¿Un disfraz imposible para la fiesta de la pedana? Juani, con ingenio y paciencia, lo saca adelante. Pero su labor va mucho más allá de la costura.

Juani es la archivera de las historias del pueblo. En su memoria guarda las medidas de tres generaciones de una misma familia. Sabe quién creció, quién se fue y quién volvió. Escucha las alegrías, las penas y los chismes benignos con discreción y cariño. Su taller es un punto de encuentro donde las vecinas, mientras esperan un dobladillo, comparten recetas, consejos y risas. Ella no solo cose tela; cose el tejido social de Humilladero.

Su impacto positivo es tangible:

  • Sostenibilidad: Fomenta la «moda circular» local. Antes de tirar, la gente piensa: «¿Se lo llevo a Juani?». Arregla, remienda y transforma, dando una segunda vida a las prendas y enseñando el valor de lo bien hecho.
  • Apoyo incondicional: Es la aliada secreta de madres con niños inquietos, de novias nerviosas y de agricultores que necesitan un remiendo fuerte. Su trato es personal, su precio es justo y su prioridad es ayudar.
  • Preservación de un oficio noble: Con sus manos, mantiene viva una tradición llena de skill y paciencia. En una era de consumo rápido, ella defiende la calidad, la dedicación y el resultado hecho a medida, literalmente.
  • Alegría comunitaria: Desde decorar el stand de la feria hasta crear el estandarte para la hermandad, Juani pone su talento al servicio de las fiestas y tradiciones que dan identidad a Humilladero.

Juani es mucho más que una costurera. Es artesana, confidente, psicóloga improvisada y animadora sociocultural. Representa el espíritu de los pueblos andaluces: cercano, resiliente y cálido. En cada puntada pone dedicación, y en cada gesto, humanidad.

Humilladero puede sentirse orgulloso. Porque mientras el hilo corra entre los dedos de Juani y su máquina no cese de cantar, el pueblo tendrá un corazón que late con fuerza, arropado con el afecto y la maestría de su costurera favorita. Un ejemplo brillante de cómo un oficio tradicional, ejercido con pasión y corazón, puede ser el motor de positividad y unión de toda una comunidad.

Gracias Juani

Social Media Auto Publish Powered By : XYZScripts.com
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad